domingo, 14 de marzo de 2010

Necesidades: Tina.



Vuelvo a editar este "relato" porque una AMIGA ha ilustrado a mi Tina.
Ilustración realizada por: Mónica Beatriz Castro Rodríguez.
Siempre gracias. Te echamos de menos,y no me refiero a Tina.

- Primero le ponemos una inyección de anestesia global, es la anestesia que ponemos cuando vamos a operarlos.- Veo como le cojen la patita y le pinchan. En pocos segundos cae semiinconsciente, la agarro del lado.- Ahora una sobredosis de anestesia y su corazón dejará de latir.-Vuelven a introducirle una aguja, pero cinco minutos más tarde ella no deja de respirar ni su corazón de latir. - Tiene un corazón muy fuerte, y mira que he puesto para unos diez kilos. Le pondré otra dosis.

He sido yo misma la que la ha llevado hasta la muerte, yo he concertado la cita con el veterinario. Los últimos años de su vida los ha pasado junto a mi madre, pero ello no puede borrar los años vividos junto a sus peludas formas de saludar. Y esta noche, durante una preciosa cena con amigos jóvenes y felices he dicho lo que siento, lo que he vivido, expresando en cada palabra la culpabilidad, la duda,“¿Y si no la hubiese llevado al veterinario?, seguramente habría vivido un año más”. La he visto nerviosa, intentando evitar el pinchazo final entre mis brazos, nerviosa y azorada, yo incrédula ante la muerte de ese ser que me dio cariño incondicional durante quince años.Y en la última respiración suspiro esperando un consuelo que sé no llegará.

He pintado de tonos grises la noche de otras personas que no se merecen mi tristeza.

No puedo evitar las lágrimas, Tina ha desaparecido del mundo real, ya sólo existirá en mis recuerdos; extraño ensayo de mi propio futuro.

No hay comentarios: